Viernes frenético

Con tanta lluvia y tanto temporal, ¿qué ocurre una tarde que no llueve, y encima es viernes? Pues que todos nos lanzamos como locos a la calle. Y yo, por supuesto, también. Tenía algunas comprillas que hacer, y se me ocurrió la brillante idea de irme al centro de Sevilla. ¿Qué pasó? Pues que casi me da un síncope!!

Comprar, compré, pero no sin luchar, por supuesto. Había colas hasta para entrar en las tiendas, madre mía! Pero bueno, valió la pena, al menos por el alijo de bolitas que me traje de Babachic, mi tienda de bolitas preferida. Ahora están en la calle Francos, más cerquita, pero también con mucho más público, lo que es mejor para ellos, aunque peor para las que vamos a comprar! De todas formas, como la chica es simpatiquísima pues te compensa. He aquí las pruebas del rato que me llevé allí:

A ver ahora qué hago con tantas bolas!!

Esta semana he terminado algunas fundas de libro:













A mí me gustan todas (claro!), pero mi favorita ha sido la de Dorothy de El Mago de Oz. No me extrañaría que fuera de las primeras que se vendieran!!

Y para terminar, un apunte para los agobiad@s: a veces, cuanta menos cuenta se echa de las cosas, mejor salen. Y para prueba, un botón. El año pasado me regalaron un jacinto, y se puso precioso, pero cuando se secó, pues no eché más cuenta de él, y dejé la maceta "abandonada" en el balcón sin echarle más cuenta. Pues bien, después de haber estado expuesta a todas las inclemencias meteorológicas de este invierno (y digo bien a todas: lluvia, viento, frío, y hasta nieve!!) ha retoñado, ahora en febrero, y aunque no tiene tantas flores como el año pasado a mí me parece preciosa, porque ha florecido frente a todas las adversidades. Ojalá pudieramos aprender de ella. Feliz puente!!